domingo, 3 de noviembre de 2013

1976

Hace 37 años. Era un mundo distinto al de ahora, del siglo pasado. No había ordenadores personales. Apple había nacido solo un día después que yo. Los otoños eran más fríos y en Madrid había cuatro diferenciadas estaciones pero no había democracia ni dictadura. Wifi o 4G no significaban nada, la w era menos utilizada pero se espiaba también en aquel tiempo.
 
España pertenecía a los países del Tercer Mundo según las Naciones Unidas pero llovía más. La esperanza de vida era de 73 años, seis menos que ahora y eran otras las enfermedades que nos atemorizaban. 1976 era ya no otro mundo sino otro planeta, un tiempo del que hemos emigrado forzosamente para convertirnos en inmigrantes digitales, en viajeros de un futuro que aún está por llegar, págabamos otros precios en otras monedas. China era más comunista que ahora pero Asia no había despertado aún a la modernidad.
 
Y en estos 37 años el conocimiento y el acceso al mismo ha cambiado de tal forma que ya no somos los mismos. ¿Y dentro de otros 37 años?. ¿Dónde andaremos?. No somos capaces ni siquiera de imaginar qué inventos habrá. Avanzamos más y más rápido cada poco, y tendremos que seguir viajando a un mundo nuevo, adaptándonos a cada hora, a cada día. 1976 era otro mundo. Todo cambió rápidamente, y si te niegas a adaptarte a ese nuevo plantea que el tiempo te impone, te quedas fuera, desapareces. Parece frío 1976 ahora en 2013, pero no creo que las personas fueran más felices que ahora, tampoco eran más infelices. Simplemente había menos posibilidades y opciones pero había las mismas cenas y amigos, los mismos chistes y risas, otras preocupaciones iguales a las de ahora.
 
Con todo, me fastidia mucho perderme el futuro cuando ya no pueda viajar, cuando la vida me niegue el visado a mi pasaporte y me pierda las mejoras que están por llegar, los nuevos mundos y lenguajes que habrá, las nuevas aficiones y costumbres que surgirán para tratar de conseguir los mismos objetivos que siempre tuvimos.
 
1976 es un pais que ya no conozco, 2050 tampoco lo puedo imaginar, sólo me queda mirar a este 2013 que ya empieza a terminar para seguir viajando como un inmigrante más.

2 comentarios:

Fernando López dijo...

Buen post Pedja: Por un lado la fugacidad de la vida, por otro el deseo y la esperanza y entre todo la vida.
Una abrazo

Pedja dijo...

Gracias Fernando, a ver si quedamos a comer y podemos hablar con calma, Paco y Ferra mediante, un abrazo.